Écriture de voyages, espace autobiographique et techniques narratives dans la production littéraire de Lucie Delarue-Mardrus et de Myriam Harry

  1. LAMSFUS FERNANDEZ, ELISA
Dirigida por:
  1. Ángeles Sirvent Ramos Directora

Universidad de defensa: Universitat d'Alacant / Universidad de Alicante

Fecha de defensa: 20 de julio de 2016

Tribunal:
  1. Francisco Lafarga Presidente
  2. María Isabel Corbí Sáez Secretaria
  3. Brigitte Leguen Peres Vocal

Tipo: Tesis

Teseo: 426196 DIALNET lock_openRUA editor

Resumen

La proliferación de estudios consagrados a la literatura de género durante los últimos años se ha visto recompensada con el creciente interés que, entre la crítica especializada y general, ha despertado la creación de escritoras que permanecían en el olvido. En efecto, una de las primeras consecuencias positivas ha sido, sin duda, el hecho de que se hayan rescatado para su análisis textos de autoras de los que, hasta ahora, tan sólo se tenía constancia de su existencia. Éste es el caso de la creación de Lucie Delarue-Mardrus y de Myriam Harry, dos mujeres cuya madurez literaria comenzó a despegar coincidiendo con los años de la Belle Époque, y en la que se centra el análisis de esta tesis. Al comenzar este trabajo ya era un hecho constatado la abundante bibliografía sobre estas escritoras y resulta sorprendente la carencia de estudios sobre sus obras, fundamentalmente queda pendiente, a nuestro entender, la elaboración de estudios destinados a profundizar en los elementos que revelen los aspectos referentes a la calidad textual y al estilo. Tomando como punto de partida el análisis comparativo de algunas de estas vertientes formales respecto a otras escritoras coetáneas, toda vez que se resalta la manera en la que el entorno literario-cultural pudiese haber condicionado sus creaciones, se nos ha permitido poner de relieve la implicación repetitiva de determinados recursos creativos y sus posibles interferencias. En primer lugar, se desvela la existencia de tres ramificaciones básicas como son la temática, el palimpsesto y el reflejo del alma íntima de las escritoras. Ello se traduce en un despliegue de aspectos secundarios que interfieren entre sí y que confluyen en un ámbito formal y de contenido común. El estudio comparativo permite, por lo tanto, presentar la base sobre la que se asienta el entramado formal y de contenido que nos conduce a establecer los parámetros que conforman la trama teórica destinada a catalogar la producción. Por una parte, las imágenes de encierro y el deseo de huida relacionan la creación femenina de la época con el palimpsesto; a su vez, la imagen de huida se traduce en el empleo del personaje infantil y adolescente y en la importancia que adquieren la naturaleza y los animales; la naturaleza – soporte de huida – busca inspiración en tierras lejanas y da lugar a libros de viajes. Por último, el deseo de confesión – relacionado con la noción de encierro y con la temática amorosa – se manifiesta en el empleo del espacio autobiográfico. Todos estos elementos relacionados entre sí constituyen el entramado temático del que parte nuestro estudio. Así pues, en la trama teórica que conforma nuestro análisis participan numerosos elementos, de entre los que abordaremos básicamente: la temática del viaje y el exotismo; el espacio autobiográfico y la intersección de géneros que lo acompañan; y por último, el estilo narrativo. Ello no excluye, lógicamente, la consideración de aspectos satélites como pudiera ser, entre otros, el recurso al personaje infantil y adolescente sobre el que se elabora el autorretrato íntimo de las escritoras en numerosas de sus obras. Un segundo nivel de concreción en nuestro trabajo se centra en establecer afinidad entre algunos de los libros de Lucie Delarue-Mardrus y de Myriam Harry. Para ello hemos elaborado una selección de obras que componen el corpus de este estudio, siguiendo criterios temáticos y que están en la base de un estadio deductivo. Dentro de este estadio, nos proponemos en primer lugar, establecer los nexos cronológicos y ahondar en el contexto socio cultural de la época. En segundo lugar, crear líneas de conexión temática desde el tratamiento que estas dos escritoras hacen del viaje y del elemento exótico y colonial en sus obras; en tercer lugar, considerar el espacio autobiográfico, la conexión entre realidad y ficción y la intención autobiográfica en libros con una clara intención referencial. En el espacio autobiográfico se teje el entramado que relaciona las obras de Lucie Delarue-Mardrus entre sí – sus Memorias y su libro de souvenirs, El Arab, l’Orient que j’ai connu –, y entre éstas y los textos de Myriam Harry, – tanto sus relatos de viajes como su novela Petites Épouses –. Por último, aportar una reflexión filológico-literaria centrada en los aspectos de la técnica narrativa empleada. Por todo ello, el análisis comparativo de algunas obras, cuya conexión hemos explicitado, nos permite emparentar literariamente a estas dos escritoras y catalogarlas, juntamente con otras, como escritoras de transición. Tanto su estilo como su temática estuvieron muy determinados durante los primeros años de sus respectivas carreras por la tradición decimonónica. La presencia de elementos y recursos argumentales característicos de las escritoras del siglo XIX se desvela, entre otros recursos, por el uso en sus textos de imágenes como las de encierro y de huida a las que ya hemos aludido. Basándonos en las teorías de las especialistas Gilbert y Gubar , que analizan la presencia de estos recursos en las escritoras anglosajonas del siglo XIX, constatamos sus implicaciones, particularmente en la producción de Lucie Delarue-Mardrus. A ello, se suma la pintura del alma femenina que transmite ese deseo de confesión tan característico de la creación femenina de la época, y que conduce a las escritoras a utilizar a sus personajes como espejo en el que mirarse y reconocerse. Además, algunos críticos como Michel Mercier y Jean Larnac, identifican este autorretrato del alma femenina que las escritoras elaboraban en sus libros como el contrapunto a la incapacidad que, según ellos, tenían estas mujeres para trasladar en sus páginas la racionalidad masculina. De este modo, tanto Jean Larnac como Michel Mercier definen esta pintura del alma femenina como uno de los recursos dominantes y característicos en el ámbito textual femenino, incapaz de penetrar en la compleja psicología del hombre . Esta tendencia a ofrecer al lector la confesión de sí mismas dio como resultado la proliferación de libros de memorias, de souvenirs y de autobiografías. Así pues, la inclusión de un capítulo dedicado al espacio autobiográfico en esta tesis nos ha parecido oportuna y necesaria. En dicho capítulo se exponen consideraciones sobre el género autobiográfico relativas al estilo formal y a la correspondencia entre realidad y ficción. La conexión entre ficción y realidad, o mejor dicho, entre relato autobiográfico y sinceridad, se apoya en el conocimiento que se tenga de la vida del escritor ya que, en otro caso, podría resultar imposible establecer correspondencias que posibilitasen un análisis coherente. Por este motivo, no se desdeña para nuestro trabajo la contribución del enfoque biografista defendido por Carlos Reis. Para este autor, el texto está determinado en gran medida por un conjunto de factores que le son ajenos, externos, que lo preceden y que conforman el conjunto de circunstancias de implicación individual del autor en su obra . En esta perspectiva biografista se ponen de relieve, por lo tanto, todos los elementos extra-textuales que explican, enriquecen y esclarecen el enfoque meramente textual. La vida, la personalidad, la evolución de los sentimientos, las relaciones o las aficiones del autor, entre otros muchos factores biográficos, vienen a completar el análisis puramente textual y a potenciar nuestro trabajo. De hecho, son tres las razones contundentes que vienen a justificar el empleo de esta perspectiva biografista: por una parte, la necesidad de contrastar los datos objetivos de la vida de las escritoras con su producción autobiográfica en la que se centra parte de este trabajo, como acabamos de señalar. Un ejemplo de ello lo constituye la novela Le roman des six petites filles donde Lucie Delarue-Mardrus describe sus juegos de infancia junto a sus hermanas y cuya conexión con la realidad –con la vida de la autora– sólo es posible mediante el conocimiento que se tenga de su biografía. También encontraremos esta relación entre vida-creación en la manera en la que se presenta la importancia que tienen la figura paterna y materna en el argumento de novelas como Le Pain Blanc o La Petite fille comme ça. Añadir que, por lo que se refiere a Myriam Harry, contamos con los cuatro volúmenes en los que, de forma novelesca, relata su propia vida y que conectan con la perspectiva de Reis desde el momento en que actores externos, como son Jules Lemaître o Cécile Chombard , nos inducen a la lectura referencial de estas obras presentadas como novelas. La segunda razón por la que optamos por la perspectiva biografista como método de apoyo para nuestra tesis se explica por el hecho de que la producción de estas autoras estuvo, en gran medida, determinada por los avatares de sus vidas. Citemos como ejemplo el caso de Myriam Harry y un dramático episodio con un falso Deuteronomio que condujo a su padre al suicidio. El suceso marcó a la escritora y despertó en ella la inquietud por narrar los acontecimientos en una novela, intención que fue el origen de su libro La conquête de Jérusalem, que obtendría el Premio Femina en 1904. El tercer y último factor obedece al hecho de que el conocer la vida de estas mujeres permite profundizar mejor a la hora de enfocar nuestro análisis de sus libros de viajes. A ello cabe añadir que precisamente este tipo de obras, los libros de viajes, constituyen a su vez, por su carácter autobiográfico, una importante fuente de información biográfica. La escritura de viajes adquiere la forma de relato en primera persona, narrando un itinerario –en presente o en pasado– y secuenciado por las etapas del recorrido. El elemento exótico conecta estos libros de viajes con un tipo de novela caracterizada precisamente por estar inspiradas en países lejanos como Cochinchina en el caso de Petites Épouses de Myriam Harry o Túnez en La monnaie de singe de Lucie Delarue-Mardrus. Ambas novelas relatan historias de amor con un trasfondo de nostalgia y de tristeza, que encuentran su reflejo en la ensoñación y el paisaje. A su vez, el paisaje tunecino simboliza la libertad para la protagonista de La monnaie de singe, bosques krumirios y desiertos tienen como contrapunto el jardín cerrado de la casa donde reside un tiempo con sus familiares en Francia, alejada del paisaje tunecino, que no conoce otro límite que la línea del horizonte. Para los personajes franceses que habitan el protectorado Indochino en la novela Petites Épouses, la exuberante vegetación de la región de Tonkín llega a resultar asfixiante, y añoran el regreso a la metrópolis, lejos de un país al que no llegan a adaptarse, del que intentan huir mediante el opio, la muerte o abandonando aquel territorio. El anhelo por regresar a Francia que poseen los personajes de la novela simboliza el deseo de huir, la imagen de encierro se transmite por la incapacidad de adaptarse a las costumbres y a las gentes del país y, sobre todo, por la vegetación desmesurada y la excesiva humedad del clima. El espacio autobiográfico en la obra de estas escritoras se aborda tras definir y comparar los parámetros de ficcionalización y referencialidad que aparecen en sus obras. La oscilación de recursos de ficción y su combinación con datos referenciales hacen difícil una clasificación genérica de las obras. La serie de Siona relata la vida de Myriam Harry, y el pacto autobiográfico queda patente desde el prólogo escrito por Jules Lemaître; sin embargo, no hay coincidencia autor-narrador-personaje sino que se sigue la técnica novelesca empleando la tercera persona narrativa y el narrador omnisciente. Le roman des six petites filles de Lucie Delarue-Mardrus sigue el mismo esquema, la escritora elabora el retrato de su infancia junto a sus cinco hermanas tomando la posición de narrador en tercera persona. Este método la diferencia de los Souvenirs de Gyp o de otras escritoras que, ciñéndose también a un período de sus vidas, respetan la forma autobiográfica en primera persona. Esta ficcionalización de la biografía se lleva a cabo mediante la participación de personajes-actores de la vida de la escritora, personajes que aparentemente son inventados y cuyos nombres no responden al de las escritoras aunque sí contienen un componente simbólico que facilita establecer la correspondencia entre narración y realidad. Otras veces, es el entorno donde actúan los personajes lo que se ve modificado. En La monnaie de singe de Lucie Delarue-Mardrus, la protagonista Alfreda, que recuerda a la nostálgica Lucie en la primera parte de la novela y la correspondencia autora-narradora-personaje parece evidente; sin embargo, el entorno en el que se despliega este espíritu soñador del personaje, reflejo fiel del espíritu soñador y nostálgico de la escritora, no se corresponde con el paisaje real de la infancia de Lucie, sino que se presenta este personaje «doble » de la escritora en una naturaleza alejada de la normanda, en Túnez. Para finalizar nuestro estudio, se abordará un análisis de la técnica narrativa que permita poner de relieve los paralelismos entra ambas escritoras tanto en lo que se refiere a la forma discursiva como a la estructura, particularmente en los libros de viajes. En este tipo de libros, autobiografía, ficción y reportaje ocupan un lugar importante y, por este motivo, pretendemos profundizar en estos tres parámetros formales del género de viajes en las autoras objeto de esta tesis. Así mismo, en este último capítulo hemos querido incluir también un breve recorrido por el empleo de recursos con función metaliteraria como pueden ser las alusiones a otros escritores dentro de los textos analizados, técnica de la que surgen numerosos ejemplos. A ello se suman las referencias que las propias autoras hacen a sus obras, especialmente en el caso de Lucie Delarue-Mardrus, que no elude referirse a sus fuentes de inspiración real para sus novelas y constancia especial de ello la dan sus Mémoires. El análisis textual encuentra su utilidad en este capítulo para relacionar los parámetros formales en los que se desarrolla el contenido y, tras ello, se despliegan o ponen en evidencia los rasgos que pudieran emparentar el estilo literario de estas dos escritoras. Dada la abundancia de obras publicadas por ambas mujeres, resulta tarea imposible abarcar todo en esta tesis, razón por la que, para nuestra investigación, hemos seleccionado las siguientes obras: de Lucie Delarue-Mardrus: Le Roman des six petites filles, La monnaie de Singe, L’Ange et les pervers, Mes Mémoires, y El Arab, l’orient que j’ai connu. De Myriam Harry : Femmes de Perse, jardins d’Iran, Irak, La petite fille de Jérusalem, Siona à Berlin, Siona à Paris y Petites épouses.